Los mercados de Tana Toraja: No sólo encontramos viandas. También cientos de animales vivos para ser sacrificados en sus singulares funerales. Entremos.

A muchos viajeros les encanta visitar los mercados máxime si se trata de países asiáticos donde nunca sabes qué sorpresas puedes encontrar. Yo no entro en ese cupo pero, he de reconocer que Tana Toraja, una pequeña zona cristiana en la isla indonesia de Sulawesi, es de esos lugares donde la visita a su mercado se hace imprescindible.

EL MERCADO DE VIANDAS

Diariamente hay un mercado de viandas y otras mercaderías para el hogar como loza o plásticos, bombonas de butano e incluso prendas de vestir.

A menudo no deja de ser un espectáculo en sí, por el batiburrillo de puestos, por el colorido de las especias, los vendedores sentados en la misma tabla en que exhiben sus productos…

Mercado de verduras y frutas Tana Toraja Indonesia

También por los pescados extraños, aunque en Toraja, por su lejanía al mar, suele encontrarse básicamente en salazón.

Puesto de pescado salado en Tana Toraja Indonesia

Y por supuesto, por la variedad de sus cafés, famosos en toda Indonesia, pero que no hay que confundir con el café Luwat, el más caro del mundo, que también se elabora en el país pero en otras áreas.

Puesto de café de Toraja en Indonesia

El café de Toraja, lo puedes encontrar en grano o molino, a granel o envasado, en grandes bolsas o en botes realizados con bambú…

Moledoras de café en mercado de Indonesia

Moledora de café que todos los vendedores poseen

MERCADO DE ANIMALES

Sin embargo, el mercado por el que Toraja es conocido no es éste sino el de animales, orgullo de la población. Se celebra una o dos veces por semana.

Nos indican que tenemos suerte. Hoy hay mercado y mañana funeral, el otro gran espectáculo, que no siempre tienes la oportunidad de pillar, aunque durante los meses de julio y agosto, tienes bastantes probabilidades.

Y que nadie se moleste ni asombre cuando hablo de “suerte” o “espectáculo” porque para ellos es realmente una fiesta. Recuerdo las palabras de mi profe de indonesio, oriunda de Toraja:

Aquí, el status de cada familia se muestra por la cantidad de animales, especialmente búfalos, que sacrifican en los entierros. Se llevan toda la vida ahorrando para ello. Para que lo entiendas enseguida: En Makassar, la gente alardea de su nivel socio-económico a través de las bodas, en Toraja, de los entierros”.

Funeral en Tana Toraja, búfalos a punto de ser sacrificados

Búfalos momentos antes de ser sacrificados en un funeral

A mí, la verdad es que, sacándome de los perros y los peces de acuario, no me des muchos animales, pero bueno, ante esa afirmación, quién no siente curiosidad por el mercado de animales. Si acaso no me acercaré mucho.

¿No acercarme mucho? Eso es imposible. O fastidias el día a quien va contigo, o tienes que meterte en el meollo, así que hale, que salga el sol por Antequera.

MERCADO DE LOS BÚFALOS

El mercado de animales está compuesto únicamente por tres especies: búfalos, cerdos y gallos.

Los dos primeros son sacrificados en los funerales. Cada especie se encuentra en una zona distinta, y es realmente increíble la cantidad que hay.

Nos guían primero a la zona de los búfalos. Me impresiona muchísimo verlos de cerca. Eso por decirlo fino, porque realmente estaba… ¿asustada?…No, … el paso siguiente.

Enormes, con una cornamenta tremenda. Y esa  anilla en el hocico en la que va la cuerda que los mantiene atados a los postes resulta escalofriante.

Búfalo con gran cornamenta en Sulawesi Indonesia

Pero más impresión aún es cuando dicen que hay que pasar entre ellos. ¿Quéééé? Ya bastante es que estoy pisando barro, charcos y boñigas y que hay ese aromilla en el ambiente.

La gente me mira entre divertida y extrañada, qué me puede pasar para quedarme ahí plantada, qué hay de raro en caminar entre búfalos?

Cierto es que me llamó la atención la tranquilidad de los bichos. Ni se inmutaban con el gentío ni se quejaban por las anillas al hocico. Así que bueno, mala suerte sería que estuviere aquello a rebosar de gente sin que los búfalos se inmutaran, y que justo se fueran a fijar en mí.

Así que respiro profundo, muy profundo, con las manos cubriéndome la nariz, eso sí. Hago como que no los veo y, aún con el alma en vilo, tiro “pa`lante”.

Si alguien, en cualquier momento de mi vida, me hubiera dicho que yo sería capaz de caminar casi rozando a los búfalos, voluntariamente y sin necesidad, me habría carcajeado hasta la saciedad.

Buey en mercado de animales de Toraja Indonesia

Y eso que en la foto no se ve tan descomunal como in situ y ahí está, el chaval manejando al bicho con una sola mano mientras bebe.

Después de instantes que parecieron eternos llegamos a un graderío de madera De repente nos pareció estar en un rodeo del oeste americano: toda una gran explanada a reventar de búfalos, cientos de búfalos.

En pocas ocasiones se utilizan como animales de trabajo. Como ya hemos indicado, son criados para ser sacrificados en los funerales y, dependiendo del poder adquisitivo de la familia podríamos estar hablando de dos… o de doscientos. Los clientes echan un vistazo, eligen los que quieren y, directamente al camión.

EL MERCADO DE CERDOS

A continuación pasamos a la zona de los cerdos. Asombro otra vez porque ellos no se veían tan tranquilos ni tan calladitos. Yo nunca he asistido a ninguna matanza, pero si alguien ha participado en alguna, ya conoce el sonido escalofriante que emiten cuando se las ven venir.

¿Que cómo lo saben? Pues listos no sé si serán, pero cuando te tumban sobre una plancha arqueada, te atan las patas y el cuello a una caña de bambú, aseguran el cuerpo con cuerdas y te ponen junto a otros colegas en una de las tropecientas filas … eso no pinta bien.

Mercado de cerdos en Sulawesi Indonesia

Aún así, no se podían quejar, para protegerles del calor tenían el detalle de poner una hoja enorme de cocotero encima de aquellos que estaban a pleno sol. ¡Que no se diga!

EL MERCADO DE AVES

Por último nos dirigimos a la zona de aves. Los gallos son los protagonistas principales.

No se sacrifican en los funerales como los dos anteriores, pero constituyen un símbolo de prosperidad por lo que no puede faltar en ningún hogar. Por otra parte, la carne de pollo es un alimento importante, prácticamente imprescindible en la dieta diaria indonesia.

El colorido era espectacular pero la verdad es que sólo la ví de pasada. Los gallos son animales por los que desde pequeña siento muchísima aversión. Así que, mira, tuve el valor de pasear entre los animales grandes y no entre los pequeños, debe ser cierto eso de que el tamaño no es lo importante.

Pinturas en fachada de casa típica de Tana Toraja Indonesia

Detalle de pintura en la fachada de una casa típica de Toraja

Antes de marcharnos, no quise dejar de conocer a la madre de mi profe, que tiene un puesto de vajillas en el mercado y que, tan amablemente, sin conocerme, un mes antes me había enviado un regalo para mis hijas. No recordaba su apellido pero siendo de las pocas familias musulmanas en la zona, no tardamos en encontrarla.

Fue tan inesperado para ella, que la reacción nerviosa fue tomar el teléfono, llamar a la hija, pasármelo y desaparecer. La hija me aclaró que posiblemente fue a contarles a todos que tenía visita de unos extranjeros, algo que a la mayoría de la población fascina.

En fin, que nos quedamos solos en el puesto, perplejos, compuestos y sin novio. Esas cosillas que aún nos quedan por pillar del país.

 

ARTÍCULOS RELACIONADOS:

Para entender mejor la singular cultura de este pueblo, no dejes de echar un vistazo a:

Tana Toraja: Ritos Funerarios

Tana Toraja: Enterramienos

Tana Toraja: Arquitectura